Los gatos persas son unos gatos de pelo largo que por norma general tienen un carácter muy tranquilo. Al tener el pelo tan largo, necesitan unos cuidados específicos, sobre todo en relación al pelo.
La razón de acudir al veterinario son dos.
Por un lado, la dueña ha notado que el gato persa tiene un pequeño bulto en la boca. Este bulto es una especie de granito o mini tumoración de unos dos centímetros en la encía. Se ha comprobado que este tumor oral no le está molestando al gato, y al ser un gato joven, el veterinario le va a recomendar esperar de tres a cuatro semanas para ver si desaparece. En ocasiones, y sobre todo en gatos jóvenes, suelen aparecer este tipo de bultos o tumores orales pequeños que suelen desaparecer sin necesidad de hacer nada.
Otro de los problemas por lo que ha acudido la dueña del gato persa al veterinario es que ha notado que últimamente hace unas heces un poco más blandas de lo normal. En este caso, la recomendación de Jacinto Legarda será hacer un cambio en la alimentación del gato. En concreto le va a proponer un alimento específicamente formulado para gatos con digestiones sensibles. De esta manera, comprobarán que de aquí a unas semanas mejoran las deposiciones del gato.
En caso de notar este tipo de problemas o cualquier otro en nuestro gato, lo más importante es acudir al veterinario para que puedan realizarle una exploración. Así, el veterinario podrá recomendar unas medidas u otras, dependiendo de los problemas que tenga cada gato.
0 comentarios:
Publicar un comentario